Biografía
Era hijo de Mahoma Abel y Liliana Hasbún. Realizó sus estudios
secundarios en el Colegio de La Salle en Santo Domingo, graduándose de
Bachiller en ciencias físicas y matemáticas en 1958 siendo el único estudiante de su
promoción en obtener el título distintivo de Alumno Eminente.
Carrera
política
Se inició en la lucha política en 1960, en labores clandestinas
contra el régimen de Trujillo.
Participó luego en las movilizaciones callejeras en los meses de julio, agosto
y septiembre de 1961.
De 1961, a raíz de la muerte de Trujillo, ingresó oficialmente
en el movimiento revolucionario "14 de junio". Se unió a las
movilizaciones estudiantiles en la Universidad de Santo Domingo en el mes de
octubre del mismo año y que culminaron con una verdadera masacre escenificada
en la calle Espaillat, el día 20 del mismo mes.
Estuvo presente en las luchas que desarrollaron los estudiantes
universitarios para obtener la Ley de Autonomía en los meses de diciembre de
1961 y de enero de 1962.
El mismo día del golpe de Estado en 1963, que derrocó el
gobierno constitucional del profesor Juan Bosch, fue apresado por las fuerzas policiales.
Se escapó del palacio policial. Posteriormente participó en las actividades de
apoyo urbano a las guerrillas, organizadas en 1963 por el movimiento "14 de
junio", y que encabezó Manolo Tavares Justo.
En 1964 fue elegido secretario general de la Federación de
Estudiantes Dominicanos (FED) y delegado estudiantil al Consejo Universitario.
En el mes de febrero viajó a Hungría en
representación de la FED para participar en un congreso organizado por la Unión
Internacional de Estudiantes (UIE).
A su regreso, dirigió la lucha de la FED contra el examen de
admisión establecido por el Consejo Universitario que encabezaba el ingeniero
José Ramón Báez López-Penha. Con el argumento de que el referido examen era un
paso para crear una "universidad de élite", Amín Abel participó en el
boicot planeado por la FED, siendo expulsado temporalmente de la Universidad
junto a otros dirigentes estudiantiles. A pesar de ello, el líder estudiantil
continuó encabezando a los estudiantes universitarios, siendo apresado
nuevamente en un acto programado por el "14 de junio" en el primer
aniversario del golpe de Estado de 1963.
En diciembre de 1963, se integró a la huelga de hambre que
declaró la FED contra las medidas tomadas por el Consejo Universitario contra
ese sindicato estudiantil.
A principios de 1965, Amín Abel Hasbún es expulsado, junto a
otros líderes de la FED, por insistir en colocar una tarja en la Facultad de
Derecho de la Universidad de Santo Domingo en homenaje al también dirigente
estudiantil y miembro del "14 de junio" Luis Ibarra Ríos, caído en
las operaciones guerrilleras de diciembre de 1963.
Resultó reelegido secretario general de esa organización ese
mismo año. Contrajo matrimonio el 24 de abril de 1965; pero al enterarse de que
ese mismo día había estallado una insurrección contra el Triunvirato, que
culminó con la intervención norteamericana del 28, se trasladó a la capital
para integrarse a la lucha armada. Combatió desde el día 26 en las calles de
Santo Domingo. A principio de mayo prestó servicios en la zona norte de la
capital donde la lucha era más intensa. Allí se integró a un comando dirigido
por el movimiento revolucionario "14 de junio". Al ser ocupada la
zona norte por las tropas opuestas a la Revolución, se trasladó al sector de la
capital conocido como Ciudad Nueva, donde trabajó, junto a militares
constitucionales y otros dirigentes políticos, en la formación de la Academia
de Instrucción Político-Militar "24 de Abril".
Al terminar la guerra, pasó de dirigente de la Juventud
Estudiantil del "14 de junio" a miembro de la comisión preparatoria
del Congreso de ese Partido. En dicho congreso celebrado en 1966, fue elegido
miembro del Comité Central ocupando la Secretaría de finanzas de esa
organización.
En diciembre de 1966 pasó a formar parte del movimiento Popular
Dominicano (MPD), donde trabajó en el aparato urbano y posteriormente en el
rural .
Mientras se encontraba realizando labores de agitación y
organización entre los campesinos de la Sección Arenoso, de San Francisco de
Macorís, fue hecho prisionero por efectivos militares el 15 de febrero de 1968.
Salió en libertad en el mes de junio de ese año.
Mientras estaba en la cárcel, escribió, junto a su compañero de
militancia política Rafael Taveras Rosario (Fafa), una serie de artículos sobre
problemas históricos. Al salir de la prisión se reintegró a sus funciones como
dirigente del MPD, desplazándose a la zona sur del país.
Después de participar como orientador en la fundación del grupo
estudiantil "Flavio Suero" de la Universidad Autónoma de Santo
Domingo, Amín Abel se ubicó en la región Este del país, intentando trabajar
políticamente entre los obreros azucareros. En esa época, volvió a ser
perseguido por fuerzas policiales y militares, acusado de participar en el
secuestro del coronel norteamericano Donald J. Crowley, ocurrido en 1970. Tanto
él como su partido y familiares negaron reiteradamente la acusación, Amín Abel
decidió retirarse de la vida común y pasar a la clandestinidad.
Asesinato
El jueves 24 de septiembre de 1970,
fue asesinado por agentes del Servicio Secreto de la Policía
Nacional Dominicana de
un tiro en la cabeza con una pistola calibre 45. Se encontraba en la casa con
su esposa, Mirna Santos, que estaba embarazada, y su hijo de dos años de edad.
Su cadáver fue velado en la explanada frontal de la Facultad de Ingeniería de
la UASD.
El raso López Acosta fue condenado a cinco años de prisión,
siendo libertado al cumplir la mitad de la condena.
Al otro día de su muerte, el Consejo de la Universidad Autónoma
de Santo Domingo lo declaró "Hijo Ejemplar del Alma Mater". En su
comunicado, el Consejo Universitario afirmó que "Amín Abel fue un ejemplar
estudiante universitario, graduado Summa Cum Laude en la Facultad de Ingeniería
y Arquitectura de la UASD".
América Latina busca su camino
Considerado como uno de los políticos marxistas de más sólida
formación teórica, Amín Abel Hasbún dejó inconcluso su libro "América
Latina busca su camino". Fue publicado, en el nivel de elaboración en que
se encontraba, en noviembre de 1972.
En ese libro, el dirigente político insistía en que
"Latinoamérica y cada país en particular tiene que elaborar su propia
línea política revolucionaria, aplicando creadoramente a su historia y a su
realidad la verdad universal del marxismo-leninismo".
Insistió en la necesidad de aprender de las experiencias
internacionales; pero siempre con miras a "construir nuestro propio
camino". Caracterizó la situación del movimiento revolucionario
latinoamericano de su época de la siguiente manera, "Nos encontramos en el
momento de la búsqueda y la investigación de nuestra realidad, aplicando a ésta
la verdad universal del marxismo–leninismo".
Su libro quedo trunco en el capítulo en que Amín Abel Hasbún
analizaba las experiencias de la revolución de Abril y la intervención militar
norteamericana de 1965.
Crimen contra Amín Abel Hasbún
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La muerte del
ingeniero Amín Abel Hasbum, el 24 de septiembre de 1970, fue un crimen que
estremeció la sensibilidad del pueblo dominicano y provocó que el Dr. Joaquín
Balaguer, cuyo gobierno fue responsable directo, se viera en la
obligación de “exigir” una investigación para el esclarecimiento del mismo. Una
farsa que no pudo impedir que una parte de la verdad saliera a flote. Como lo
demuestra el expediente que a continuación publicamos, todos los detalles del
espeluznante asesinato fueron desvelados, mas no así la responsabilidad directa
del Ejecutivo, ni la participación de manos extrañas, allende los mares, en
todo lo que aconteció en aquellos meses. Los investigadores se cuidaron de no
preguntar más allá de lo recomendado, temerosos de que en cada respuesta fueran
saliendo los responsables intelectuales del crimen del Día de Las Mercedes.
El expediente preparado por la
Procuraduría General de la República, firmado por el doctor Marino R.
Ariza Hernández, deja establecidos detalles hasta ahora desconocidos por
la generalidad de los dominicanos, muestra palpable de la forma en que el
gobierno del doctor Joaquín Balaguer aniquiló lo más preciado de la generación
que lo enfrentó durante sus doce años de gobierno. (El expediente original de
la Procuraduría de la República reposa en el Fondo Presidencia del Archivo
General de la Nación, Leg. . 7565, Exp. 28, It 3107565. Para esta nota fueron
utilizadas las colecciones de periódicos El Nacional y Última Hora;
documentos del archivo personal de Rafael (Cucuyo) Báez Pérez, depositados en
el AGN, y el libro “He aquí la Izquierda” de la autoría de Rafael Chaljub
Mejía).
La situación política después de la
guerra civil
Finalizada la guerra civil de Abril de
1965, luego de la firma del Acta institucional y el Acta de Reconciliación que
llevó a la presidencia provisional al doctor Héctor García Godoy, los Estados
Unidos iniciaron los preparativos para la desocupación militar de la República
Dominicana. El gobierno provisional comenzó de inmediato los preparativos para
las elecciones generales, que fueron celebradas el 10 de junio y en la que
salió triunfante, de manera dudosa, el Partido Reformista y electo el doctor
Joaquín Balaguer, quien ocupó la presidencia en la primera semana de julio de
1966 dando inicio al período de los 12 Años de Balaguer (1966-1978).
Antecedentes políticos
La situación política era sumamente
tensa, y mientras las tropas norteamericanas abandonaban el país, el gobierno
de Balaguer se preparó para gobernar apoyado en una política de
contrainsurgencia que privilegiaba la represión política y el crimen selectivo
por encima de los principios democráticos y el respeto de los derechos
ciudadanos.
Para muchos de los que participaron en
la Revolución de Abril la guerra no había terminado. Una parte de la izquierda
no tuvo la capacidad para entender la nueva situación y pensó que era
posible pasar a una segunda etapa del enfrentamiento cívico-militar y lograr lo
que en varios meses de lucha armada no se había obtenido: la vuelta a la
constitucionalidad sin elecciones, y para los radicales, el triunfo de la
revolución y la formación de un gobierno popular y revolucionario semejante al
que desde Cuba, encabezaba Fidel Castro. Para ese fin, muchas de las
organizaciones de izquierda prefirieron esconder las armas de sus “comandos”,
antes que entregarlas como había sido pactado, a la espera de la nueva
oportunidad.
La política de contrainsurgencia del
régimen desató la persecución, encarcelamiento y el asesinato de los
combatientes de Abril más destacados. En los pueblos, los que habían regresados
y recibidos como héroes, comenzaron a vivir en la clandestinidad. Antes los
asesinatos a mansalva, muchos prefirieron salir hacia el extranjero, para
evitar morir a manos de organizaciones paramilitares que actuaban amparadas por
el gobierno.
Mientras tanto, las organizaciones de
izquierda eran estremecidas por las luchas internas, que trajeron rápidamente
la división y multiplicación de las mismas. Surgieron nuevas agrupaciones como
el Partido Comunista de la Republica Dominicana, mejor conocido como PACOREDO,
la Línea Roja del 14 de Junio, Voz Proletaria, el Partido Comunista Dominicano,
y grupúsculos que surgían y desaparecían de la noche a la mañana, a la vez que
otras se fortalecían con el trasiego de la militancia de unas hacia otras, como
fue el caso del Movimiento Popular Dominicana, al que ingreso una parte
importante del otrora poderoso Movimiento Revolucionario 14 de Junio (1J4).
Esto fue acompañado de iniciativas de definición ideológica, construcción de
estrategias para la guerra, la formación del “verdadero partido comunista”,
enfrentamientos en discusiones sin sentido centradas en la representatividad de
los países con regímenes comunistas.
Fue en ese marco, que el Movimiento
Popular Dominicano (MPD) y otras agrupaciones comenzaron a definir el
enfrentamiento contra el gobierno de Balaguer: el Catorce de Junio envió a
muchos de sus cuadros para prepararse militarmente para la guerra y dio pasos
para que sus cuadros comenzaran a penetrar en la zona rural del país, para
repetir la táctica guerrillera de Mao Tse Tung del “campo que rodea la ciudad”.
Un poco parecido también actuó el MPD, al decidir infiltrar a varios de sus
dirigentes en la zona rural, apoyado en la táctica político-militar de “lo
mejor al campo”, lo que aconteció en 1967, al mismo tiempo que daba paso para
sacar a un selecto grupo para adiestrarse fuera del país en la guerra de
guerrilla y a tomar cursos de formación política. En ese apresto fueron
detenidos en el aeropuerto de Punta Caucedo, como se llamaba al Aeropuerto de
las Américas, el dirigente Henry Segarra Santos y el adolescente Jorgito
Puello, hijo del dirigente del MPD Jorge Puello Soriano, mejor conocido como El
Men.
El MPD entre la represión y los errores
políticos
Un duro golpe sufrió el MPD con la
muerte del abogado Guido Gil, 17 enero 1967. Este “cuadro” del MPD había
participado en la Conferencia Tricontinental en Cuba y a la hora de su
desaparición, era asesor del Sindicato Unido del Central Romana; pero esto no
amedrentó su organización, que por el contrario insistió en las definiciones y
buscaba la forma de evitar que sus dirigentes fueran apresados o asesinados.
Para la lucha guerrillera en la zona rural se acuñó la consigna de “Lo mejor al
Campo”, estableciendo las famosas “Tumbas vivas”, tenidas como lugares
estratégicos en que los responsables de la guerrilla estarían escondidos o
“sepultados”, de donde salían solo para preparar a los campesinos para
organizar la guerrilla.
17 enero 1968 el MPD celebró la
“Conferencia Nacional de Cuadros Profesionales Guido Gil” en la que trató de
trazar las líneas para impulsar la lucha contra el gobierno de Balaguer,
consolidándose en la misma las posiciones militaristas, además de tratar de
evitar las “desviaciones ideológicas” del MPD. La Conferencia decidió impulsar
la lucha armada en la zona urbana organizando núcleos armados, que incluían ex
combatientes de la revolución de Abril, con integrantes de diversas
procedencias sociales. Estos agrupamientos luego serian conocidos como CRC o
los Comandos Clandestinos Revolucionarios. A la zona rural fueron enviados
cuadros para organizar la guerrilla.
A finales de 1968 el MPD, bajo la
dirección de Maximiliano Gómez y Otto Morales, seguía buscando los correctivos
para impulsar su propuesta revolucionaria. Con ese propósito organizaron la
“Conferencia Nacional de Cuadros Hilda Gautreaux”, la que consolidó el
prestigio del Moreno como principal líder del MPD. La “Hilda Gautreaux”, como
se le llamaba a la nueva táctica militarista, puso en primer plano la
conspiración en los cuarteles militares, mantuvo niveles de organización de la
guerrilla campesina y pasó a formar en la zona urbana a los CRC; además de
romper con el “seguidismo internacional”, propiciando como centro de su táctica
“golpe de Estado revolucionario”. Este golpe de Estado para derrocar a
Balaguer, descansaría en la unidad de todas las fuerzas nacionales,
incluyendo a la derecha recalcitrante, como fue el caso del Partido Quisqueyano
Demócrata de Elías Wessin y Wessin, el coronel que durante la revolución
de Abril se convirtió en el símbolo de la contrarrevolución y principal militar
responsable del genocidio civil en aquella guerra de 1965. A partir de ese
momento, toda la fuerza del MPD se concentró en hacer contactos con militares
activos y con los partidos que deberían formar parte del esfuerzo
anti-balaguerista. Con esta propuesta política el MPD se convirtió en el
partido de izquierda de más incidencia en la población, mientras que el PCD
buscaba la fórmula electoral tratando de unificar al PRD con Francisco Caamaño
Deñó, que para entonces se encontraba en Cuba en gestiones libertarias,
acompañado de nutridos grupos de ex combatientes de Abril, principalmente de
miembros de la organización 14 de Junio.
La represión se acrecentó contra el MPD
a finales de 1969 llevando a varios de sus principales dirigentes a las
cárceles, y el 14 de enero de 1970 fue apresado Maximiliano Gómez (El
Moreno), máximo líder del MPD, lo que estremeció su estructura organizativa y asestó
un duro golpe a la política de golpe de Estado y todos los planes que
desarrollaba el MPD, que en esos días perseguía el desplazamiento de
Balaguer tratando de impedir la celebración de las elecciones generales
para establecer un gobierno revolucionario. Cada cierto tiempo se escuchaba el
rumor de que en cualquier momento Balaguer era o ya había sido derrocado por
las fuerzas que discutían la forma del famoso “golpe de Estado
revolucionario”. El 26 de febrero de 1970, al caer la tarde, corrió
el rumor de que ese día se había ejecutado el “golpe de Estado” esperado; pero
todo era mentira, incrementándose la represión, el crimen a diario, los
allanamientos, la militarización del país y el incremento de las
protestas populares.
El secuestro de Donald J. Crowley
Mientras tanto, el MPD seguía
buscado la fórmula para sacar a su máximo líder de la cárcel de La
Victoria, donde se encontraba junto a decenas de dirigentes y miembros de su
organización y de otros partidos de izquierda. La manera de proceder para
liberar al Moreno, fue secuestrar a un agregado militar de la Embajada
Norteamericana, coronel Donald J. Crowley, quien residía en el país desde 1968.
El coronel Crowley fue secuestrado el 24
de marzo de 1970 por un llamado “Comando Unitario Antirreleccionista”, que
exigió a cambio de su liberación la libertad de 20 prisioneros políticos de
izquierda. La Comisión mediadora para poner fin al secuestro de Crowley
estuvo integrada por Monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito, obispo de Santo
Domingo, el rector de la UASD, doctor Rafael Kasse Acta y el presidente de la
Asociación Dominicana de Abogado, doctor Bienvenido Mejía Mejía.
La Comisión actuaba buscando una salida
conveniente que evitara el derramamiento de sangre, y el MPD se movía
intentando aplicar su táctica de golpe de Estado y una dudosa operación
militar que buscaba recibir los presos políticos canjeados, los que deberían
ser liberados en el Parque Duarte de la zona colonial a una hora de la mañana
escogida, pero el gobierno se negó a permitir que los presos políticos fueran
liberados en ese lugar y aceptó la salida al exilio de los prisioneros
políticos, entres los que viajarían Maximiliano Gómez y otros altos dirigentes
del MPD. Para finalizar la crisis creada con el secuestro, el coronel americano
fue liberado en el patio del Seminario Santo Tomas de Aquino. Conocida la
liberación, los izquierdistas canjeados salieron hacia México. El 2 de
abril el coronel Donald J. Crowley viajó hacia Washington, regresando semanas
después para identificar a los acusados de su secuestro.
Faltaban semanas para las elecciones
generales de mayo y la tensa situación política preveía la no participación en
las mismas del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), el Movimiento de
Integración Democrática (MIDA), el PQD, el Partido Revolucionario Social
Cristiano (PRSC), y otras organizaciones de derecha. Al mismo tiempo se
promovía una huelga general, mientras tropas militares recorrían las calles y
ocupaban con tanques de guerra la Ciudad Universitaria de la UASD. Faltando
semanas para las elecciones regresó al país el Profesor Juan Bosch, quien había
salido hacia España en 1966. Balaguer se perfilaba como triunfador en el
certamen electoral, pues tenía el control del Estado y del aparato electoral y
militar, lo que garantizaba la continuidad de su gobierno.
Electo Balaguer en unas fraudulentas
elecciones, comenzó la desbandada de los opositores, mientras sectores de
izquierda esperaban, esperanzados, el regreso de Caamaño encabezando un
movimiento guerrillero. Los meses posteriores a las elecciones fueron marcados
por el asilamiento en embajadas, principalmente la de México, de líderes
opositores, y el MPD comenzaba a enfrentarse de manera violenta con el
PACOREDO, lo que debilitaba sus fuerzas y lo hacía alejar de su propósito
principal que era el derrocamiento de Balaguer.
La Policía anuncia “resolvió el
Caso Crowley”
El 9 de junio de 1970 la Policía
informó que resolvió el caso del secuestro Crowley, mostrando “las
pruebas” y explicando que los secuestradores utilizaron la casa de
uno del MPD. El entonces jefe de la Policía, Rafael Guzmán Acosta, acusó del
hecho (véase Ultima Hora, 9 de junio 1970, p.4), a: Héctor Antonio
Ortiz Jaquez, Rafael Luna Cabrera, Rafael Francisco Taveras Rosario, Amín Abel
Hasbum, Ivonne Altagracia Payano Chevalier, Manuel de Jesús Checho Loubriel,
Julio Amaury Justo Duarte, Héctor Rafael Justo Duarte, Bartolomé Arias Muñiz o
Manuel Antonio Muñiz, Otto Morales y un ingeniero conocido como Pedro “de quien
se dijo vivía en el sector de Gazcue”. De todos estos, fueron apresados Ortiz
Jaquez, Luna Cabrera, Ivonne A. Payano y los hermanos Justo Duarte (quienes
luego pudieron demostrar que no estaban vinculados al secuestro). Estaban
libres y siendo perseguidos: Arias Muñiz, Otto Morales, Fafa Taveras, Amín
Abel, el ingeniero “Pedro”, y Checo Lubriel. La PN acuso de ser los
líderes del secuestro a Ortiz Jaquez, Amín Abel, Rafael Luna Cabrera,
Fafa Taveras, Checo, y Otto Morales.
Las investigaciones fueron dirigidas
directamente por el coronel Luis Arzeno Regalado y el mayor Leónidas Herasme
Díaz. Junto al MPD la Policía también acusó a la agrupación Voz
Proletaria y a la Línea Roja del 14 de Junio, y destacó que Otto Morales
dirigió de manera directa el secuestro. El 10 de junio Rafael (Fafa) Taveras
Rosario fue detenido en Santiago mientras viajaba en un carro. La madre de
Héctor Ortiz, Doña Catalina Ortiz, se suicidó ahorcándose con el cordón de una
plancha.
La persecución de los implicados se
redobló y fueron hechas públicas las denuncias de que los perseguidos podían
ser asesinados. El 1 de julio fue sustituido como jefe de la Policía el General
Guzmán Acosta y en su lugar fue nombrado el general Osiris Perdomo. El 9
de julio una comisión de familiares de los perseguidos, encabezada por Magaly
Pineda (esposa de Fafa Taveras) denunció un “plan para asesinar a los
implicados en el secuestro” y responsabilizaron al coronel
Luis Arzeno Regalado, jefe del departamento del Servicio Secreto de la Policía
Nacional, de lo que pudiera pasarle a sus familiares.
La represión iba en incremento y a
mediados del mes de Julio el Profesor Juan Bosch denunció la existencia de la
organización terrorista de derecha conocida como La Mano, y acusó a sus
miembros de ser responsables de varios atentados contra políticos de la
oposición. El 16 de julio fue asesinado Otto Morales, el Secretario General del
MPD. Otto había sido apresado por la Policía en la residencia del decano de la
Facultad de Ingeniería de la UASD, profesor arquitecto René Sánchez Córdoba, hecho
que llevó a declarar al doctor José Francisco Peña Gómez (véase el periódico
Ultima Hora del 22 de julio), que la muerte del izquierdista tuvo
relación con actividades de la CIA. Otto era el principal acusado del secuestro
del coronel Crawley. El 24 de septiembre, día de Las Mercedes, fue asesinado
por la Policía el principal dirigente del MPD en el país, el Ingeniero Amín
Abel Hasbum, a quien la policía acusaba de ser de los responsables del
secuestro.
El 23 de mayo de 1971 fue asesinado en
Bruselas, Bélgica y de manera misteriosa, Maximiliano Gómez, El Moreno, quien
era el máximo líder del MPD. El 7 de julio del mismo año,
temprano en la mañana, cayó acribillado Roberto Figueroa, mejor conocido como
Chapó, quien al momento de su muerte era el máximo dirigente del MPD.
Chapó fue asesinado mientras caminaba por la zona colonial, próxima a la calle
El Conde. Con esta última muerte el MPD entró en una crisis que llevó a esa
organización a la lucha interna, el enfrentamiento con otras organizaciones de
izquierda y al desmembramiento en pequeñas organizaciones sin influencia
en los movimientos sociales de la época.